El concurso de CARTUCHERAS COMPLETAS había sido ganado por
Marina. Tenía una cartuchera de tres pisos. En el primero tenía los elementos
básicos: lapicera de pluma, lápiz negro, sacapuntas, regla, goma, borra tintas,
liquid paper, y una cajita de cartuchos para cuando el de la lapicera se
vaciara.
En el segundo piso estaban las biromes de brillito de todos los
colores, y algunos lápices con punta bien filosa.
Y en el tercer piso los crayones. Ninguno partido. Ningún color
ausente. Cartuchera completa. Qué completa? CARTUCHERA DESBORDANTE!
En cambio Celeste tenía una cartuchera, que a los ojos de los
demás podríamos llamarla: CARTUCHERA POBRE. Ella no ganó el premio claro.
Tenía su lapicera con cartucho, pero su lápiz negro estaba
diminuto. Es que Gonzalo se lo pedía siempre y tiene la manía de sacarle punta
a cada rato asi que se lo había dejado enano.
Los crayones estaban partidos por viajar de cuaderno en
cuaderno:
-‘Celeste me prestas el rojo?’ ‘Cele tienes amarillo?’
Preguntaban siempre sus compañeros. Y el típico chiste:
-‘Celeste tienes Celeste? ‘Y ella se reía, a veces se
enojaba, pero siempre prestaba! De lo que tenía daba.
Y como los chicos no siempre devuelven las cosas que piden
prestadas, a Celeste se le empezó a empobrecer la cartuchera. Y por supuesto no
ganó el concurso.
Una de sus amigas le preguntó a Cele si estaba triste por no
haber ganado el premio, y ella contestó que en la Iglesia a donde asistía cada
domingo, su maestra una vez leyó en la Biblia que debemos mirar en los ojos de
nuestro prójimo a Jesús, y que cualquiera que te pida aunque sea un pequeño
vaso de agua, si tú se lo dabas era como si estuvieras dándoselo al mismo
Jesús. Y celeste recordaba ese ejemplo cuando algún compañero le pide un lápiz,
una goma o una regla.
Asi que a Celeste no le importaba tanto el premio a LA
CARTUCHERA COMPLETA como el PREMIO A PRESTARLE A JESÚS cada vez que alguien
venía en busca de ayuda.
La Biblia dice en el libro de PROVERBIOS:
‘Prestarle al pobre es como prestarle a Dios, y Dios siempre
paga sus deudas’
Proverbios 19:17
Recuerda ser generoso y prestar al necesitado, no solo tus
útiles, sino lo que él o ella necesiten y tu tengas hoy para dar.
También cuida tus materiales, ponle nombre y observa que te sean
devueltos para que no se te empobrezca la cartuchera y ya no puedas bendecir a
los demás.
Dios te bendiga!
NATALIA MANAGO
http://diezminutoscondios.blogspot.com/
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