ENSEÑANZA DEL PERSONAJE A TRABAJAR POR EL GRUPO #3
¿Quién era Pedro?
Pedro era un hombre de Betsaida ciudad de Galilea (Juan 1:44), en la ribera nordeste del
lago de Genesaret; su nombre verdadero era Simón. Al igual que su padre Jonás y
su hermano Andrés, Pedro era pescador (Marcos
1.29). Estaba casado (Mateo 814),
advirtiéndose en sus cartas un modo especial de recomendar la atención de los
maridos a sus esposas; sabía por experiencia los matices de la convivencia
matrimonial; no consta que tuviese hijos, y en el Evangelio de Mateo nos
refiere cómo Jesús curó a su suegra que vivía en Capernaúm (Mateo 8:14-15).
Antes de conocer a Cristo, había sido
-probablemente- discípulo del Bautista (Juan
1:39), así como su hermano Andrés, ya que éste (Andrés) es quien les
condujo a Jesús.
ENSEÑANZA DEL PERSONAJE A TRABAJAR POR EL GRUPO #2
Características de Simón
Jesucristo no le eligió por ser el más inteligente
o el más culto de los apóstoles; en él se advierte un corazón impetuoso y
fuerte, lleno de arrebatos no siempre oportunos, menos inquebrantable de lo que
hubiera sido de desear, pero con una mezcla de fe, entusiasmo y bondad que sin
duda respondían al deseo del Maestro; nadie le admitiría para dirigir una gran
empresa (la inestabilidad pone en peligro los negocios); sus antecedentes no
inspiran confianza, y un partido político no lo elegiría como su líder. Podemos
ver que los criterios de eficacia tienen poco que ver con los planes de Dios.
ENSEÑANZA DEL PERSONAJE A TRABAJAR POR EL GRUPO #1
¿Cómo conoció Pedro a Jesús?
Asiste al primer milagro de Jesús en las bodas de
Caná, en Caperrnaúm, mientras ejercitaba su oficio de pescador, escucha las
enseñanzas y presencia los milagros del Señor hasta recibir la llamada a
seguirle como discípulos dejándolo todo -San
Juan 1:35-42-. Antes del Sermón del Monte es elegido como uno de los Doce
discípulos de Jesús.
ENSEÑANZA DEL PERSONAJE A TRABAJAR POR EL GRUPO #4
La conversión y cambios de Pedro
Luego de su encuentro y entrega a Jesús, no solo su
nombre cambio... “y mirándole Jesús,
dijo: tú eres Simón, hijo de Jonás; tú serás llamado Cefas, que quiere decir
Pedro”-Juan 1:42- ; sino también
su vida. Jesús no desconocía la debilidad y las negaciones de Pedro: "Simón, Simón, he aquí que Satanás os ha
reclamado para zarandearos como el trigo; pero yo he rogado por ti para que tu
fe no desfallezca; y tú cuando te conviertas, confirma en la fe a tus hermanos"-Lucas 22:31-32- , pero eso no fue
obstáculo para seguir confiando en él.
ENSEÑANZA DEL PERSONAJE A TRABAJAR POR EL GRUPO #3
Carácter de Simón Pedro modificado:
Reacciona con la declaración de fe arrodillándose
ante Jesús, y confiesa su condición de hombre indigno de estar tan cerca del
enviado de Dios. Su vida anterior de hombre concreto y cercano a lo que se
puede palpar y contar, queda superada al reconocer el milagro. Entonces sigue a
Jesús dejándolo todo. Las posibles resistencias para seguir al Maestro se
desvanecen y la generosidad aflora de una manera clamorosa.
Poco a poco adquiere confianza y supera el posible
envaramiento y la timidez pondría como excusa su poca inteligencia y
preparación declarándose pescador y no precisamente estudiante. Los evangelios
nos muestran un claro talante de liderazgo. Poco a poco, se va convirtiendo en
portavoz de los demás. Todo, sin perder la sencillez. Jesús le trata con especial
confianza.
Pedro mejora su fe, su oración, y muchas virtudes,
pero también esa confianza y sencillez permiten que se manifiesten sus
defectos, quizá antes escondidos por la timidez que se suele dar en los que
comienzan. La fe de Pedro es una fe de fuego. Nunca la fe es separable del
amor. Al crecer el amor, crece la fe, y viceversa.
Creemos porque amamos, y amamos a aquel que se nos
revela como bueno y sabio. Pedro cree en Jesús y le ama.