Dejando la mentira, hable cada uno a su
prójimo con la verdad.
Efesios 4:25
Hassan era un niño árabe.
Un día le
tocó viajar a Bagdad. Su madre sabía que había bandidos por el camino que a
veces asaltaban a los viajeros. Para esconder las monedas que mandaba para los
gastos de su hijo, ella los cosió en el manto del niño.
Cuando Hassan
estaba listo para salir, su madre le dijo:–Hijo, prométeme que nunca dirás una
mentira. Si hablas siempre con la verdad y eres honrado, te va a ir bien.
Hassan le
prometió que no mentiría.
Antes de
que empezara el viaje, la madre oró por su hijo y pidió que Dios mandara sus
ángeles para protegerlo en el camino.
Cuando
pasaba por un desierto lo asaltaron unos bandidos. Hassan no llevaba muchas
cosas. Su ropa no les interesaba a los bandidos. Lo que buscaban era dinero;
pero no encontraron ni una sola moneda en el bultito que llevaba.
El jefe
de los bandidos no podía comprender cómo el niño viajaba sin dinero.
–Muchacho,
¿no me digas que viajas sin dinero? –le dijo–.
¿Cómo es
que no llevas nada?
–Yo tengo
dinero –dijo Hassan–. Tengo 80 ducados cosidos en mi manto.
El jefe
de los bandidos pensó que el niño bromeaba. Él y sus compañeros se rieron a carcajadas–
¡Ja, ja ja! Muchacho mentiroso...
Pero Hassan
insistió en que era verdad. Entonces al jefe de los bandidos revisó el manto y
encontró el dinero.
– ¿Por
qué me avisaste acerca del dinero? –le preguntó muy sorprendido a Hassan.
–Porque
le prometí a mi mamá que nunca iba a mentir –respondió el niño.
El
bandido lo miró boquiabierto y dijo:
– ¿Qué?
¿No me mentiste debido a una promesa?
Bajó la
cabeza y quedó pensativo un rato, luego dijo:
–Tú, un
niño, eres fiel a tu madre, y yo, un hombre anciano, cada día quebranto las
leyes de Dios.
Le
extendió la mano a Hassan y prosiguió:
–Dame la
mano, muchacho. Desde ahora dejaré los caminos de pecado.
Para Hassan
era normal hablar con la verdad. Su madre le había leído la
Biblia, y
él habían aprendido que la mentira es pecado.
Hassan
amaba al Señor Jesús y quería obedecerlo en todo lo que hacía.
Los demás
bandidos siguieron el ejemplo de su jefe y Hassan les explicó lo que enseña la
Biblia.
Los
bandidos comenzaron una nueva vida, todo porque hubo un niño que le prometió a
su madre no mentir.
AYUDAS
VISUALES
No hay comentarios.:
Publicar un comentario