TEMA 2 : ¿Y QUÉ NOS DICE JESUS SOBRE LA GENEROSIDAD? (Domingo 11 de Octubre )

OBJETIVOS

-          LOS NIÑOS CONOCERAN LA PARABOLA DEL RICO INSENSATO

-          LOS NIÑOS TRAERAN ALGUNAS DE SUS BENDICIONES PARA AYUDAR A OTROS NIÑOS

-          LOS NIÑOS SE DARÁN CUENTA QUE EN CASA TENEMOS MUCHAS COSAS QUE PODEMOS COMPARTIR CON LOS DEMAS.

BASE BÍBLICA: LUCAS 12:13-21

VERSICULO PARA MEMORIZAR: HEBREOS 13:16

INTRODUCCIÓN:

Comience diciéndole a los niños que tiene una gran hambre ya que no alcanzó a desayunar en casa pero que alguien le regaló unos chocolates o galletas lo que usted crea conveniente, explíqueles que no se los va a comer porque no quiere que se le terminen ya que le gustan demasiado y quiere guardarlos para algún día especial, su maestro ayuda interviene y le dice que se lo regalaron para quitarse el hambre que en ese momento tiene ,no para que los guarde y se le arruinen y nunca los disfrute, que le anime a comérselos y as compartir con todos(procure que no sea un chocolate o galleta para cada uno sino que puedan partirlo en varias parte y compartirlo con los demás.

Luego tenga listo un rompecabezas gigante, con el tema de la clase ¿y qué dice Jesús sobre la generosidad? Cuando lo armen comience la Historia bíblica.

HISTORIA BIBLICA:

Una vez más nos encontramos a Jesús enseñando a las multitudes cuando, de repente, alguien le dijo. “Maestro, por favor, dile a mi hermano que divida la herencia de nuestro padre conmigo.”

En tiempos de Jesús, por lo general cuando había un conflicto, las personas iban a un rabino (un maestro) para resolver el desacuerdo. Así que este hombre creía que Jesús podía resolver su problema. 
Sin embargo, él fue muy grosero, porque se interrumpió a Jesús y Sus enseñanzas. Él era codicioso y no estaba prestando atención a las cosas importantes que Jesús estaba enseñando, él sólo quería que su problema fuera resuelto. 
¿Sabes lo que significa la codicia? Es alguien que sólo piensa en el dinero y en las cosas materiales, y quiere más y más y nada lo hace feliz. 

 
Jesús no estaba allí para resolver problemas de este hombre, Él estaba allí para enseñar.

 

Así que le dijo al hombre: Amigo, ¿quién me puso por juez sobre ustedes para decidir cosas como esa? Entonces Jesús les advirtió a todos, porque todos ellos necesitaban oír lo mal que la codicia es.

 
“¡Tengan cuidado con toda clase de avaricia! La vida no se mide por cuánto tienen”. 
Entonces Jesús les contó una historia. Él dijo: “Un hombre rico tenía un campo fértil que producía buenas cosechas.”
  

Así que el hombre rico pensó para sí mismo: “¿Qué debo hacer? No tengo lugar para almacenar todas mis cosechas”.













 
Entonces pensó: “Ya sé. Tiraré abajo mis graneros y construiré unos más grandes.

Así tendré lugar suficiente para almacenar todo mi trigo y mis otros bienes. 
Y siguió pensando y dijo para sí: Luego me pondré cómodo y me diré a mí mismo: ‘Amigo mío, tienes almacenado para muchos años. ¡Relájate! ¡Come y bebe y diviértete!’”.

 
Infelizmente, este hombre sólo estaba pensando en sí mismo, no pensaba en Dios que había creado todo y que era Dios que produjo la buena cosecha para este hombre.
Él también no estaba pensando en otras personas, como alimentar a los pobres y ayudar a los que tenían muy poco.
 
Así que Dios le dijo: “¡Necio! Vas a morir esta misma noche. ¿Y quién se quedará con todo aquello por lo que has trabajado?”. La Biblia no nos dice quien llego y tomo todas sus posesiones, pero estamos seguros de que alguien lo hizo.

Así que tenemos que tener mucho cuidado de cómo pensamos y actuamos con todas las cosas buenas que Dios nos da, porque lo mismo podría pasar con nosotros si guardamos todo y no lo compartimos con los necesitados.
Sí, las personas se olvidan de ser generosos cuando se acumulan riquezas terrenales y se olvidan también  de tener una relación rica con Dios.

APLICACIÓN A LA VIDA DIARIA 
Muchas veces tenemos en nuestras casas cosas que no necesitamos y se están empolvando y ensuciando, tenemos ropa y zapatos que ya no nos queda, o en el peor de los casos muchas veces votamos a la basura la comida que nos sirven porque no nos gusta, y no nos damos cuenta que Dios nos bendice a nosotros no para acumular las bendiciones en nuestra casa sino para que las compartamos con otros que no tienen ropa o zapatos o comida o juguetes,
¿Qué les parece si esta semana le decimos a nuestros padres que nos ayuden a recoger los zapatos, ropa, juguetes que ya no usemos, los lavamos muy bien y los traemos el próximo domingo para guardarlo en nuestras bolsas de regalos para niños que lo necesitan?

PREPARANDONOS PARA SER GENEROSOS

En esta oportunidad vamos a hacerles un hermoso regalo a los niños que nos visitarán se trata de una paleta divertida,los niños pueden trabajarla como mejor les parezca y depositarla en nuestra bolsa de regalos, pueden agregarle un versículo.